Perpetuando la memoria
Se cumplen por estos días cinco año desde el accidente aéreo en Arequipa en el cual un grupo de jóvenes chilenos perdió trágicamente la vida. Entre ellos estaba Soledad Novales Nazal, estudiante de Periodismo de la Universidad Diego Portales. En su recuerdo, sus compañeros plantaron en el local de avenida Ejército un árbol que más tarde fue trasladado a la nueva sede de la Facultad. También se trasladó una significativa placa de madera con un poema dedicado por el auxiliar José López a las dos Soledades (Novales y Aris), ambas fallecidas en muy corto tiempo. Pero el más sólido y persistente recuerdo es el que instauró la familia Novales Nazal, conocida por su activa presencia profesional y comercial en Los Angeles. Azotada por un dolor brutal e inesperado, en recuerdo de Soledad, estableció una beca destinada a a apoyar los estudios de post-grado de egresados de Periodismo de la Universidad Diego Portales. En estos años han sido beneficiados tres estudiantes. Dos pudieron seguir estudios de Doctorado en Madrid y de Magister en Santiago, respectivamente, mientras que un tercero recibió un apoyo complementario para su especialización en Londres. Una Comisión integrada por un representante de la familia Novales Nazal y de la Universidad evalúa cada año las postulaciones y sigue de cerca el desempeño académicos de los beneficiados, cuyo compromiso es integrarse posteriormente a la enseñanza universitaria. En los tres casos, los estudiantes han sido calificados en forma sobresaliente. Ello, sin duda, es la mejor respuesta al espíritu de la Beca, cuyo propósito explícito es perpetuar el amor por la vida y la pasión por el periodismo que animaron a María Soledad, así como para hacer fructificar la esperanza que tenían en ella sus padres, su familia y la Universidad Diego Portales. Santiago, abril de 2001 |